Los ladrones no necesitan mucho tiempo ni oportunidad para entrar en su casa y causar daños irreparables. De hecho, la mayoría de los delincuentes pueden entrar en una casa en sólo 20 segundos si saben lo que hacen. Por eso es tan importante asegurarse de que su casa es lo más segura posible antes de salir por la noche o de ir a trabajar.
La puerta principal es una de las primeras cosas que verá un ladrón cuando intente entrar en tu casa, así que debería ser una de las últimas cosas que vea cuando intente salir de nuevo. Mantener la seguridad de la puerta de entrada con un dispositivo antirrobo es un gran primer paso para proteger su casa y a sus habitantes de posibles intrusos. En este artículo, analizaremos algunos de los tipos más comunes de dispositivos antirrobo y sus respectivos pros y contras.
Cadena de puertas
Una cadena de puerta es un dispositivo antirrobo barato que puede instalarse fácilmente en cuestión de minutos. Este artilugio se instala en el interior de la puerta y consta de dos partes: una cadena que atraviesa la puerta y un lazo en el exterior de la puerta que puede utilizarse para abrir o cerrar la cadena. Puede ser una buena opción para una casa con niños o para una persona mayor que tenga problemas para levantar los brazos por encima de la cabeza.
Algunas cadenas para puertas pueden cortarse fácilmente si un intruso está especialmente decidido, pero hay muchas que pueden ser difíciles o imposibles de cortar. Las cadenas para puertas pueden ser un elemento disuasorio eficaz, pero también pueden ser más difíciles e incómodas que otros dispositivos antirrobo. Sin embargo, suelen ser menos costosas que otras opciones.
Cerradura de puerta
Una cerradura de puerta es uno de los dispositivos de seguridad más comunes en el hogar. Es un dispositivo mecánico o electrónico que se instala en la puerta o cerca de ella y que puede utilizarse para bloquear y desbloquear la puerta desde el interior y el exterior. Las cerraduras vienen en una amplia variedad de estilos y materiales, incluyendo cerraduras de llave, cerraduras de combinación, cerraduras de huella digital y cerraduras de código de acceso.
Las cerraduras con llave son las más comunes en las puertas y son una buena opción para un dispositivo antirrobo. Cuando se instalan correctamente, estas cerraduras son muy difíciles de romper o destruir para un ladrón, ya que están diseñadas para ser resistentes, pero también son fáciles de desbloquear para el propietario cuando llega a casa o tiene compañía.
Si hay niños pequeños o personas mayores o discapacitadas viviendo en la casa, es posible que desee buscar una cerradura sin llave, que se puede desbloquear con un código de acceso o una huella digital. Es una buena opción para las personas que tienen problemas de destreza o de memoria.
Cerradura de puerta electrónica
Una cerradura de puerta electrónica es similar a una cerradura de puerta mecánica con una diferencia clave: tiene un componente electrónico que le permite desbloquearse cuando el propietario pasa el código de acceso o las huellas dactilares correctas.
Las cerraduras electrónicas son una excelente opción para las personas que tienen dificultades con la destreza manual, ya que pueden controlarse fácilmente con un simple botón o una pantalla táctil. Al igual que las cerraduras mecánicas para puertas, estos dispositivos están disponibles en una amplia variedad de estilos y materiales, como las cerraduras con teclado y las cerraduras con huella dactilar.
Las cerraduras de teclado son fáciles de desbloquear para cualquier persona de la casa, pero no son tan seguras como las cerraduras mecánicas. Las cerraduras de huella dactilar son uno de los tipos más seguros de cerraduras de puertas disponibles y son una gran opción para un dispositivo antirrobo. Estas cerraduras son muy difíciles de evitar o de abrir para un ladrón sin la huella dactilar correcta.
Anclaje de la puerta
Un anclaje de puerta atornillado es un dispositivo que se instala en la bisagra de una puerta. Se parece un poco a un tornillo largo y está diseñado para permanecer dentro de la bisagra cuando la puerta está abierta. Este dispositivo está pensado para engancharse en el marco de la puerta cuando ésta está cerrada y evitar que se cierre por completo. Es un dispositivo antirrobo muy barato y se puede quitar fácilmente, pero no es muy fiable y se puede sortear fácilmente si el ladrón está decidido. Lo mejor es utilizar esta opción en combinación con otro dispositivo antirrobo.
Tope de puerta electrónico
Un tope de puerta electrónico es un dispositivo que se instala en una superficie cercana a la puerta y que impide que ésta se abra por completo. Se trata de otro dispositivo antirrobo barato que puede ser fácilmente burlado, pero puede ser muy útil en combinación con otro dispositivo. Los topes electrónicos para puertas se utilizan a veces en los hoteles para evitar que las personas que están en los pasillos abran las puertas de los huéspedes.
Y estos topes de puerta pueden configurarse para que se abran si el huésped pasa la tarjeta correcta o utiliza la llave de su habitación. Son una buena opción para un dispositivo antirrobo en un apartamento o una residencia de estudiantes porque pueden retirarse fácilmente cuando el residente necesita acceso total.
Conclusión
Una cadena de puerta y una cerradura de puerta son dos de los dispositivos antirrobo más comunes instalados en las puertas delanteras. Una cadena de puerta es un dispositivo que se puede instalar en el interior de una puerta y es útil para las personas que no pueden levantar los brazos por encima de la cabeza. Una cerradura de puerta es un dispositivo mecánico o electrónico que puede utilizarse para bloquear y desbloquear la puerta desde el interior y el exterior.
Las cerraduras electrónicas son una excelente opción para las personas que tienen dificultades con la destreza manual, ya que pueden controlarse fácilmente con un simple botón o una pantalla táctil. Estos dispositivos vienen en una amplia variedad de estilos y materiales y son una gran opción para un dispositivo antirrobo.
