Cuando se trata de una planta de interior, mantenerse neutral en cuanto al CO2 puede no ser tan fácil como parece a primera vista. Es bien sabido que las plantas utilizan CO2 y liberan O2 para crear su propio alimento a partir de la luz solar, el agua y el CO2. Sin embargo, el grado en que esto ocurre es menos conocido. Por eso, en este post vamos a desentrañar el mundo de la respiración de las plantas. Siga leyendo para saber todo lo que siempre quiso saber sobre la respiración de las plantas.
¿Qué es la respiración de las plantas?
La respiración vegetal es el proceso por el que las plantas liberan CO2. Este proceso también se conoce como fotorrespiración. El CO2 liberado por la respiración de las plantas suele llamarse también «CO2 desperdiciado», porque no se utiliza en la fotosíntesis y, por tanto, no contribuye al crecimiento de la planta.
Existen dos tipos principales de respiración vegetal. La fotosíntesis C3 es el tipo normal de fotosíntesis que se produce en la mayoría de las plantas. La fotosíntesis C4 se da en algunas plantas tropicales, como el maíz.
¿Por qué es importante la respiración de las plantas?
Cuando las plantas crecen, toman el CO2 de la atmósfera y, en un proceso conocido como fotosíntesis, utilizan la luz solar y el agua para transformar el CO2 en oxígeno y en un carbohidrato. Mientras que la transformación de CO2 en O2 forma parte del proceso de fotosíntesis, la transformación de CO2 en carbohidratos es sólo una parte de la respiración de una planta.
Las enfermedades y las plagas utilizan la respiración de las plantas (CO2) para crecer y sobrevivir. Por lo tanto, si una planta libera rápidamente CO2 es porque está siendo atacada.
Las plantas en condiciones de poca luz suelen liberar CO2 sin realizar la fotosíntesis, ya que ésta requiere mucha energía. Las condiciones de poca luz dan lugar a altas tasas de respiración, lo que puede ser una estrategia de ahorro de energía. En condiciones de mucha luz, las plantas pueden no tener suficiente energía para hacer todo lo que les gustaría hacer, y en condiciones de poca luz, pueden no tener suficiente energía para hacer todo lo que necesitan hacer.
CO2 y respiración de las plantas

Algunas especies de plantas respiran naturalmente más que otras. Estas plantas suelen denominarse plantas de «alta respiración». Las plantas que se consideran de ‘baja respiración’ son lo contrario.
Las diferencias en las tasas de respiración de las plantas se deben en gran medida a las tasas de fotosíntesis y a la forma en que la planta utiliza la luz solar.
Las tasas de respiración más altas también pueden deberse a los tipos de suelo que se utilizan. Los suelos arcillosos son muy densos y retienen más agua que los arenosos. Los suelos arenosos son mejores para el crecimiento de las plantas y liberan más CO2 que los arcillosos debido a su bajo contenido en agua.
¿Cómo puede saber si sus plantas respiran?
Las plantas respiran igual que los humanos, aunque no podamos verlo. La mejor manera de saber si una planta respira es medir la cantidad de CO2 en el aire circundante. Existen varios dispositivos para ello, pero quizá el más accesible sea el medidor de CO2. También hay aplicaciones que pueden utilizarse para medir el CO2.
Para medir el CO2 en el aire, pon la muestra de aire en un tubo de ensayo. Añade un poco de agua a la muestra para frenar el escape de CO2. Mide el nivel de CO2 con un medidor de CO2. Si hay muy poco CO2 en el aire, la planta puede estar recibiendo muy poco CO2. Si hay demasiado CO2, la planta no lo está utilizando todo.
La razón evolutiva de la respiración de las plantas: la fotosíntesis y el CO2
Cuando las plantas desarrollaron la capacidad de realizar la fotosíntesis, los niveles comunes de CO2 eran unas 100 veces superiores a los actuales. Para que las plantas pudieran aprovechar al máximo esta abundante fuente de CO2, necesitaban una forma de deshacerse de él. Así nació la respiración vegetal.
Las plantas necesitan el CO2 para crecer, pero no pueden seguir tomándolo y almacenándolo indefinidamente. Si lo hicieran, acabarían agotando sus propias reservas de CO2 y morirían. La respiración vegetal es el proceso por el que las plantas se deshacen del exceso de CO2.
Resumen
Para sobrevivir, las plantas necesitan luz solar y CO2. Durante la fotosíntesis, el CO2 se utiliza para producir glucosa y oxígeno. A continuación, las plantas liberan el CO2 mediante un proceso conocido como respiración. La principal diferencia entre la fotosíntesis y la respiración es que durante la respiración, el CO2 se utiliza para crear energía y no se produce glucosa.
A diferencia de la fotosíntesis, la respiración no puede utilizar agua ni producir azúcar. Si no se produce azúcar, la planta no puede crear oxígeno. Sin embargo, la planta produce CO2 durante el proceso de respiración.
Las plantas pueden utilizar el CO2 para producir energía y crecer. Esto sucede porque durante la respiración, el CO2 es descompuesto por las enzimas en dióxido de carbono y energía. Cuanto más CO2 haya en la atmósfera, más energía podrán obtener las plantas. Como resultado, habrá más CO2 en la atmósfera, lo que provocará el calentamiento global.
Conclusión
Cuando se trata de una planta de interior, mantener el CO2 neutral puede no ser tan fácil como parece a primera vista. Es bien sabido que las plantas utilizan CO2 y liberan O2 para crear su propio alimento a partir de la luz solar, el agua y el CO2. Sin embargo, el grado en que esto ocurre es menos conocido. Por eso, en este post vamos a desentrañar el mundo de la respiración de las plantas. Siga leyendo para aprender todo lo que siempre quiso saber sobre la respiración de las plantas.